“Nuestro Salvador dijo: ‘Si no coméis la carne del Hijo del hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros, […] Porque mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida’ (Juan 6:53-55). Esto es verdad de nuestra naturaleza física. Incluso esta vida terrenal se la debemos a la muerte de Cristo. El pan que comemos ha sido comprado por su cuerpo quebrantado. El agua que bebemos ha sido comprada por su sangre derramada. Jamás alguien, santo o pecador, come su alimento diario sin ser nutrido por el cuerpo y la sangre de Cristo. La cruz del Calvario está estampada en cada pan. Está reflejada en cada manantial. Todo esto enseñó Cristo al designar los emblemas de su gran sacrificio. La luz que resplandece de ese rito de la Comunión en el aposento alto hace sagradas las provisiones para nuestra vida diaria. La despensa familiar viene a ser como la mesa del Señor, y cada comida un sacramento” (Elena de White, El Deseado de todos los gentes, p. 403).
1 Corintios 11:24-26
Institución de la Cena del Señor
(Mt. 26.26-29; Mr. 14.22-25; Lc. 22.14-20)
23 Porque yo recibí del Señor lo que también os he enseñado: Que el Señor Jesús, la noche que fue entregado, tomó pan;
24 y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo que por vosotros es partido; haced esto en memoria de mí.
25 Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre; haced esto todas las veces que la bebiereis, en memoria de mí.
26 Así, pues, todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que él venga.
SIGNIFICADO DE LA CENA DEL SEÑOR
Con la institución de la Santa Cena, se cerró el ritual de la pascua judía. Fue establecida una nueva ceremonia para Ia nueva nación establecida en Cristo, el Israel espiritual. Cristo es el Cordero de Dios que cumple las predicciones y las prefiguraciones del Antiguo Testamento con relación al rito pascual: ”Porque Cristo, nuestro Cordero pascual, ya ha sido sacrificado” (1 Cor. 5:7). En Ia cruz, él derramó su “preciosa sangre, como un cordero sin mancha y sin defecto” (1 Ped. 1: 19). El pan sin levadura era el “pan de la aflicción” que los antiguos israelitas comieron al salir de Egipto (Deut. 16:3). Jesús usó el mismo símbolo para representar su propio sufrimiento, a fin de liberarnos de la esclavitud del pecado. La Cena tiene un contenido escatológico, que puede ser explicado por Ia esperanza de los creyentes de que su comunión con Cristo será cumplida de modo perfecto en el Reino de Dios, cuando el Señor regrese gloriosamente, a fin de unir a su Pueblo en comunión con él. “Porque cada vez que comen este pan y beben de esta copa, proclaman la muerte del Señor hasta que él venga” (1 Cor. 11:26).
Contexto histórico de la Cena
Judíos y gentiles acostumbraban realizar comidas para su comunión y fraternidad. Era natural, por consiguiente, que tanto los creyentes judíos como los creyentes gentiles adoptasen Ia práctica de la Santa Cena. Antiguamente, existía Ia llamada ”Fiesta del amor”, que enfatizaba el deber cristiano de amarse mutuamente (Jud. 12). Había dos tipos de comidas: una comida común, tomada con el propósito de nutrición, en la que las personas confraternizaban, y la Santa Cena, que tenía elementos rituales y simbólicos. El apóstol Pablo hace distinción entre ellas y dio orientaciones claras para que no hubiese excesos en la Cena del Señor: “Por Io tanto, cualquiera que coma el pan o beba de la copa del Señor de manera indigna, será culpable de pecar contra el cuerpo y Ia sangre del Señor (1 Cor. 11:27). “Indignamente” (anaxios) denota participar de la Cena del Señor tratándola como comida común, no dándole importancia a la solemnidad simbólica, sin un examen introspectivo. De ahí la recomendación del apóstol Pablo: “Así que cada uno debe examinarse a sí mismo antes de comer el pan y beber de la copa” (1 Cor. 11: 28). La expresión “examinarse” (dokimázo) es de continuidad, el comer y el beber también debe ser continuamente. O sea, el cristiano debe estar siempre preparado para participar de la Cena del Señor. Si no se da Ia participación del cristiano en el recordatorio de los sufrimientos de Cristo, el creyente está desobedeciendo una orden directa del Señor. Pero Ia participación sin autoexamen también se constituye en una desobediencia. Al cristiano Ie resta examinarse con Ia intención de arreglar Io que sea necesario, a fin de así poder participar del recordatorio. EI apóstol Pablo concluye sus consideraciones sobre los dos tipos de cenas presentando el deseo de que las dos fuesen realizadas separadamente. El que tiene hambre, que coma en casa y venga al memorial de Cristo preparado para ese momento solemne. Y como un cuerpo, disfrute de ese momento junto con toda Ia iglesia (1 Cor. 11:33, 34).
Elementos utilizados en Ia Cena
“Cuando llegó el día de la fiesta de los Panes sin levadura” (Luc. 22:7, cf. Éxo. 12:20). Los panes tenían que ser sin mezcla, sin levadura, sin fermento, símbolos del pecado. Así deben ser el pan y el vino de Ia Santa Cena, sin ninguna mezcla, porque son símbolos del cuerpo de Jesús: “El Señor Jesús, la noche en que fue traicionado, tomó pan. [… ] Este pan es mi cuerpo, que por ustedes entrego; [… ] Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre hagan esto, cada vez que beban de ella, en memoria de mi” (1 Cor. 11: 23-26). El trigo que debe ser usado en el pan debe ser de trigo especial y el aceite (de preferencia de oliva) debe ser 100% puro (Sal. 104:5). El pan y el vino deben ser especiales, puros y hechos especialmente para ser ofrendados en la ceremonia de la Santa Cena (1 Cor. 10:16, 17; Mat. 26:26; Mar. 14:22-24).
Lo que Jesús hizo en la cena
1. Tomó el pan.
2. Agradeció a Dios.
3. Partió el pan
(Mat. 26:26; Mar. 14:22; Luc. 22:19;1 Cor. 11:23, 24; Juan 13:1-17. Curiosamente hizo estas tres cosas cuando alimentó a los cinco mil y a los cuatro mil hombres, cf. Mar. 6:41 y 8:6).
4. Tomó la copa.
5. Agradeció a Dios.
6. Dio a los discípulos.
Antes de comer del pan y beber de la copa, Jesús participó del rito de la humildad (rito que precede a la ceremonia de la Cena del Señor, fue instituido por Cristo y prescripto a la iglesia cristiana. Juan 13:1-17). El objetivo de esta ordenanza es llevar a los participantes a examinar su propio corazón y ver las raíces de amargura y otros defectos de carácter. Y también eliminar malos entendidos entre los hermanos, enseñar la humildad, la igualdad y el amor fraternal.
Lo que Jesús dijo durante Ia Cena “Esto es mi cuerpo”
(1 Cor. 11:24). Hay diferentes opiniones sobre el significado preciso de estas palabras. Pero, Io que es seguro, es que Jesús estaba indicando que daría su cuerpo en sacrificio para que nosotros tuviéramos vida.
“Hagan esto en memoria de mí”
(1 Cor. 11: 24). Jesús les dijo a sus seguidores que repitiesen esta acción a través de los tiempos. Así se acordarían de sus sufrimientos y de su segunda venida.
“Esta copa es el nuevo pacto”
(1 Cor. 11:25). Todas las referencias al pacto nos llevan de regreso al ritual del Antiguo Testamento de realizar una alianza, un acuerdo o tratado, con sacrificio, como en el pacto entre Dios e Israel después del Éxodo (Éxo. 24:1-8). Esta expresión también sugiere que Ia esperanza del nuevo pacto, descrito en Jeremías 31: 31 al 34, fue realizada en Cristo.
“Derramada por muchos para el perdón de pecados”
(Mat. 26:28). El significado de la muerte de Cristo como sacrificio está relacionado con un entendimiento de la pascua y del pacto. Sin embargo, es importante que reconozcamos que Ia Cena del Señor también está relacionada con el siervo sufriente de Isaías 53, que ”ofreció su vida en expiación” (lsa. 53:10).
Para reflexionar
La Cena del Señor es una participación de los emblemas del cuerpo y de la sangre de Jesús, como expresión de fe en él, como nuestro Salvador y Señor. En esta experiencia de comunión, Cristo está presente para encontrarse con su pueblo y fortalecerlo. El servicio de Ia comunión está liberado para todos los que deseen participar de él. AI participar de la ceremonia de la Santa Cena, ¿de qué forma eso puede mejorar mi vida espiritual? Piensa y ora al respecto de esto en las próximas 24 horas.
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